La niña de tus ojos
España (1998) *
Duración: 121 min.
Música: Antoine Duhamel
Fotografía: Javier Aguirresarobe
Guion: Rafael Azcona, David Trueba, Carlos López, Manuel Ángel Egea
Dirección: Fernando Trueba
Intérpretes: Penélope Cruz (Macarena Granada), Antonio Resines (Blas Fontiveros), Jorge Sanz (Julián Torralba), Jesús Bonilla (Bonilla), Neus Asensi (Lucía Gandía), Loles León (Trini), Rosa María Sardà (Rosa Rosales), Santiago Segura (Castillo), Miroslav Taborsky (Vaclav), Johannes Silberschneider (Joseph Goebbels), Karel Dobry (Leo), Götz Otto (Heinrich), María Barranco (Mujer del embajador), Juan Luis Galiardo (Embajador), Hanna Schygulla (Magda Goebbels), Heinz Rilling (Hippel).
El No-Do da cumplida noticia de un ejemplo de colaboración hispano-alemana con la partida hacia Berlín de un equipo cinematográfico comandado por el director Blas Fontiveros, con la actriz recién descubierta Macarena Granada y el famoso actor Julián Torralba, que lleva un brazo herido como consecuencia de la guerra.
Norberto Cantero, el productor, es un fascista que ha conseguido el apoyo del ministro de propaganda nazi Joseph Goebbels, para el rodaje de una película sobre bandoleros en doble versión, alemana y española en los estudios de la UFA.
Una vez en Alemania les presentan a Maisch, que será el director de la versión alemana y a Heinrich, el actor de dicha versión, aunque enseguida se dan cuenta de que los decorados son totalmente inapropiados y no representan la Sierra de Ronda.
Como colega de profesión, Julián se muestra ante Heinrich dispuesto a aprender alemán si es preciso, ya que este le indica que Alemania no le faltará trabajo, viendo poco después cómo en el camerino lo coge de sus partes, comprendiendo que su amabilidad se debe a que es homosexual.
Y pese a que él presume de ser muy macho acaba aceptando una cena a la que este le invita para conseguir que le den un papel en la UFA.
Entretanto Macarena se muestra preocupada por su padre, represaliado por su ideología y que permanece en la cárcel, asegurando que si no lo sacan no actuará.
Llegada la noche, el grupo de españoles, pese a llevar muy poco tiempo allí comienza a echar de menos España, por lo que salen a cenar al barrio judío, donde Bonilla les dice que ponen lentejas, siendo, sin esperarlo, testigos de la noche de los cristales rotos, viendo cómo destrozan el restaurante y todas las tiendas judías del barrio.
Enseguida acudirán a una recepción organizada por Aníbal, el embajador español, para agradar a Goebbels, deseoso de conocer a Macarena, a la que le asegura que la conoce y la admira, aprovechando ella la pasión de él para quejarse de la producción, amenazándole con regresar a España si no mejoran los decorados, pidiéndole él que le entreguen un listado con todas sus necesidades.
Durante la fiesta la mujer del embajador se acuesta con Julián, el cual monta por la noche un escándalo cuando Castillo, homosexual como Heinrich trata de seguir el camino marcado por aquel, intentando liarse con el galán español que se siente ofendido de que se haya puesto en duda su hombría, y para demostrarla se acuesta con Lucía Gandía, que abandona para ello a Bonilla, con el que estaba antes.
Gracias a Macarena las cosas cambian y los decorados mejoran, y llegan nuevos extras más creíbles como bandoleros españoles que los rubios alemanes que los representaban hasta ese momento, sacados directamente de un campo de concentración, aunque Macarena los encuentra demasiado tristes mientras canta, interesándose por uno que parece muy triste, que le cuenta que es un judío ruso, al que ella le enseña a dar palmas mientras canta "Los piconeros", primero en español y luego en alemán, viendo sin embargo como tras finalizar el rodaje los soldados se llevan nuevamente a los presos.
Poco después observa cómo mientras ellos comen bien los prisioneros pasan hambre, sin que ni siquiera les permitan acercarse a ellos, quitándoles el plato que ella les había entregado.
Pero a cambio de sus mejoras Goebbels exige algo más, invitando a Macarena a una cena privada en un lujoso restaurante donde no falta la orquesta, aunque está abierto solo para ellos dos.
Entretanto el resto del equipo acude a un restaurante más modesto, donde bailan, y donde Rosa Rosales, una de las secundarias, que siempre está borracha le recrimina a Blas que permita que el cojo - Goebbels - esté con ella pese a que es su amante.
Entretanto Goebbels le muestra su admiración a Macarena asegurándole que debería interpretar a Isabel la Católica, la mujer que expulsó a los judíos de España.
Macarena se siente incómoda y trata de marcharse tras la cena, aunque Goebbels le dice que solo la dejará marchar si le canta una canción, y ella interpretará para él "La bien pagá"
Llega entonces la noticia de la muerte del padre de Macarena en prisión por la neumonía, aunque Blas le pide a Bonilla que no se lo cuente.
Macarena debe acudir a un nuevo encuentro con Goebbels, que esta vez no parece dispuesto a permitir que le dé largas como en las ocasiones anteriores, por lo que se abalanza sobre ella, que consigue librarse de su acoso gracia a una llamada de Hitler.
Macarena se muestra cada vez más protectora con Leo, el judío ruso, con el que trata de dar celos a Blas, al que le ve que no se implica a fondo con su relación, excusándose él en que no puede hacer nada, ya que está casado y no puede abandonar a su mujer y a sus hijos.
Ella lleva a los extras al comedor pese a la oposición de los soldados alemanes para que puedan comer paella con ellos.
Magda Goebbels, la esposa del ministro de propaganda solicita una entrevista con Blas, preocupada por la relación de su marido con Macarena, pidiéndole al director que le diga a Macarena que no se resista ante los requerimientos de su marido, ya que cree que nada enamora más a un hombre que la resistencia, diciéndole que debe darle placer, aunque evitando quedarse embarazada.
Y tras la reunión, y justo cuando van a rodar una de las escenas claves de la película, la de la muerte del hombre al que ama, Blas le da a Macarena la noticia de la muerte de su padre, consiguiendo así que ella la ruede con un gran apasionamiento.
Cuando terminan finalmente las escenas de los figurantes, ven cómo los soldados se los llevan ya de forma definitiva, lo que la entristece mucho, besando Macarena a Leo antes de marcharse.
No obstante cuando Julián se niega a rodar la escena de la muerte del bandolero, que se produce cuando tras dispararle se despeña por un barranco, al observar cómo su homólogo alemán queda magullado tras interpretarla, deciden utilizar un doble, eligiendo para ello a Leo, ya que trabajó como trapecista en un circo ambulante.
Leo realiza la escena como estaba previsto, aunque tras la caída huye, ocultándose entre los decorados mientras se organiza un tiroteo.
Macarena lo ayudará al encontrarlo en su camerino ocultándolo en su baúl.
Julián vuelve a acostarse con la mujer del embajador, que descubre que su brazo, supuestamente herido por la metralla, realmente solo tenía un rasguño.
Mientras los policías buscan al huido, encierran a los actores en el camerino de Macarena, donde Rosa se da cuenta de que está allí el prisionero oculto.
Mientras están allí un soldado va a buscar a Macarena, aprovechando ella la llamada para sacar de allí a Leo oculto en una maleta, en la que este, que es contorsionista se oculta, y con la que carga el chófer hasta el coche que ha de llevar a Macarena a la casa de Goebbels.
En los platós los soldados continúan con la búsqueda, encontrando allí a Julián, el único que no estaba en el camerino debido a su aventura con la esposa del embajador, al que confunden con el judío, y al que le disparan hiriéndole, esta vez de verdad, en el brazo.
Su detención supondrá que las autoridades den por concluido el incidente dejando libres a los actores y al equipo técnico español.
Una vez en la residencia de Goebbles, Macarena abre la maleta y saca de ella a Leo, al que debe esconder tras una cortina, ya que por su postura dentro de la maleta apenas puede andar.
A Macarena se le ocurre para ayudarle a escapar que se haga pasar por el chófer que la llevó a ella, para lo que llama a este y le pide a Leo que lo golpee, para quedarse con su traje, aunque deberá ser finalmente ella quien lo golpee, si bien no tienen tiempo para llevar a cabo su plan, ya que llega Goebbels, el cual, al ver la maleta saca su pistola.
Su prevención se acaba cuando encuentra a Macarena esperándolo en el dormitorio, viendo cómo se desnuda ente él sin poner en esta ocasión resistencia alguna, aunque sin entusiasmo.
Y cuando el alemán trata de acostarse con ella, Leo le golpea la cabeza y hace que Macarena se vista, tras lo que ambos se besan apasionadamente.
Llegan entonces en varios taxis el resto de miembros del equipo de rodaje para buscarla, oyéndola gemir, y descubriendo que no está con Goebbels, al que encuentran sin sentido.
Para tratar de arreglar la situación, Blas decide llamar a Magda Goebbles a la que le explica que su marido le prometió a Macarena abandonar el gobierno y pedir el puesto de embajador de Alemania en España para poder estar con ella.
Blas le explica que él ama a Macarena y no desea perderla, y para que Magda no pierda a su marido le pide que les consiga los billetes de avión para él y para Macarena, que podrán marcharse gracias a las gestiones de la señora Goebbels esa misma noche a París, diciéndoles la mujer que admira su amor, pues lo que ha hecho supondrá el fin de su carrera.
Van directamente desde allí al aeropuerto, donde está preparado el avión que ha de llevarlos, aunque en vez de Blas será Leo quien acompañe a Macarena, a la que todos despiden con cariño, diciéndole Blas a Macarena que hará gestiones para que pueda viajara hacia Argentina, donde él le conseguirá trabajo.
Macarena, agradecida besa a Blas, que verá cómo la mujer a la que ama sube al avión.
Ven cómo llega entonces un coche policial que se dirige al avión, del que unos segundos después bajan a un hombre, aunque ven aliviados que no se trata de Leo, pudiendo partir poco después el avión sin más problemas.
Y solo cuando el avión ha partido caen en la cuenta de que tuvieron que confundir con Leo a otra persona, ya que la policía les dijo que lo habían cogido, dándose cuenta de que el que falta es Julián, al que rescatan de prisión, teniendo el pelo rapado, y contándoles que lo torturaron, a él, que era tan fascista.
La película se cancela finalmente y les hacen regresar a España, a todos, excepto a Blas Fontiveros, al que Goebbels desea ver para aclararlo todo.