Dieta Mediterránea
España (2009) *
Duración: 102 min.
Música: Salvador Niebla y Josep Mas "Kitflus"
Fotografía: Albert Pascual
Guion: Joaquín Oristrell y Yolanda García Serrano
Dirección: Joaquín Oristrell
Intérpretes: Olivia Molina (Sofía), Paco León (Toni), Alfonso Bassave (Frank), Carmen Balagué (Loren), Roberto Álvarez (Ramón), Jesús Castejón (Pepe Ripoll), Jordi Martínez (Padrastro Frank), Usun Yoon (Hoshi).
Sofía nace prematuramente en una barbería, el mismo día de junio de 1968 en que Bob Kennedy es asesinado. Durante quince años, crece entre los fogones y las mesas de la casa de comidas de sus padres.
Fascinada desde niña por la cocina, Sofía decide abandonar sus estudios para trabajar pese a la oposición de sus padres, consiguiendo trabajo en un Restaurante en que Frank es encargado.
Y aunque este no le prorroga, salen juntos, hasta que él decide desaparecer tras pelearse con Toni en la gasolinera donde este trabaja, para no meterse en líos con la guardia civil, uno de cuyos miembros es su padre.
Tras esa experiencia comenzará a trabajar en el restaurante de su padre, siendo sus platos una atracción que hace que el restaurante suba como la espuma.
Pero ella quiere algo más. Y Frank le propone el modo de lograrlo: debe empezar desde abajo en un hotel donde él trabaja como maître.
Le seguirá para descubrir que el sueño es una pesadilla, pues Frank no está dispuesto a llegar a algo serio con ella, ni sentimental ni profesionalmente, no pasando del puesto de ayudante del segundo chef, dedicándose a hacer platos sin ningún arte.
Por ello, la llegada de Toni le anima a dejarlo todo, aunque el compromiso de Frank de ayudarla y de compartir su cuarto finalmente le hacen decidirse a continuar.
Pese a todo regresa de nuevo al restaurante familiar y se casa con Toni, teniendo tres hijos en cinco años.
Toni, convertido en un avispado promotor inmobiliario, decide retirar a Sofía de la cocina, justo en el momento en que reaparece Frank y le hace una tentadora oferta: ir a Francia para aprender con uno de los mejores chefs mundiales.
Para ello tendrán que llegar a un compromiso: ella irá a Francia y Toni se ocupará de los niños, mientras Frank acondiciona uno de los mejores restaurantes del pueblo que está en venta, en unas ventajosas condiciones. Formarán una sociedad en la que Frank dirigirá el restaurante, Sofía la cocina y Toni se encargará del papeleo.
Superada su estancia francesa, Sofía regresa para hacerse cargo del restaurante que lleva su nombre y que empieza con buen pie, aunque poco a poco fallará el público, no preparado para las exquisiteces a alto precio del restaurante, que solo remontará el vuelo tras la visita del chef francés y de un importante crítico gastronómico.
Tras ello el restaurante sube como la espuma y todo comienza a ir sobre ruedas.
Y de pronto se ven los tres socios acostándose juntos y viviendo felices de ese modo, llegando a comprarse un hotel para vivir sus vidas lejos de los rumores del pueblo.
Todo se romperá cuando, tras el regreso de unas vacaciones se encuentren con Frank decidido a convertirse en un hombre normal dispuesto a casarse con una japonesa.
Sofía ya no lo necesita. Su cocina es internacionalmente famosa, aunque cada vez hace menos el amor con su marido y su vida personal no va tan bien.
En un homenaje al que acuden todos los cocineros importantes del país reaparece Frank que se da cuenta de que la cocina de Sofía no funciona porque ella no es feliz.
La reaparición de Frank, hace que de nuevo se replanteen su vida y decidan volver a llevar la vida que les hacía felices.
Y así unos meses después nace una niña que tendrá dos padres y una madre.