Cuento de invierno
Conte d'hiver (1991) * Francia
Duración: 114 Min.
Música: Sebastien Erms
Fotografía: Luc Pagès
Guion y Dirección: Eric Rohmer
Intérpretes: Charlotte Véry (Félicie), Frédéric van den Driessche (Charles), Michel Voletti (Maxence), Hervé Furic (Loïc), Ava Loraschi (Elise), Christiane Desbois (Madre), Rosette (Hermana), Jean-Luc Revol (Cuñado), Haydée Caillot (Edwige), Jean-Claude Biette (Quentin), Marie Rivière (Dora).
Durante unas vacaciones, Felicie y Charles tienen un apasionado romance de verano, hasta que, acabado este deben separarse, dándole Felicie a él, una dirección errónea debido a un lapsus, por lo que pierden el contacto.
Cinco años después, en Navidad, Felicie vive en el frío París con su madre y con su hija Elise nacida nueve meses después de aquel verano.
Felicie trabaja en la peluquería que regenta Maxence, con el que mantiene una relación sentimental que compatibiliza con Loic, un librero católico, sin terminar de decidirse por ninguno de los dos, debido a que no puede olvidarse de Charles, cuya fotografía preside su casa.
Pero de pronto Maxence le cuenta que se ha separado de su mujer y que se va a vivir a Nevers, donde tendrá su propia peluquería, y le pide que vaya con él.
Ella acepta la propuesta y se va a conocer la peluquería, la casa y la ciudad, regresando encantada a París y decidida a dar el paso de abandonar la ciudad, lo que cree que le ayudará a olvidarse definitivamente de Charles, ya que piensa que allí no se lo encontrará.
Y efectivamente se traslada a la ciudad con su hija, dándose cuenta de inmediato de que no encaja en esa nueva vida y de que no le gusta la actitud de Maxance, por lo que decide abandonar esa nueva vida apenas comenzada y regresar a París.
Allí volverá a ver al paciente Loic, que, a pesar de todo la recibe cariñosamente e incluso le propone que viva en su casa.
Saldrá con él a menudo, incluso con su hija, y llegan a dormir en su casa, aunque no llega a comprometerse. Pese a ser un hombre muy bueno y cariñoso cree que no está a su altura, dado que él es un intelectual, y ella es muy simple y además tiene miedo de volver a comprometerse.
Tras realizar algunas compras para fin de año suben a un autobús y de pronto se da cuenta de que frente a ella va Charles con una mujer, Dora.
Ella le cuenta que por un error le dio mal la dirección, pero luego decide bajarse del autobús, creyendo que Dora es su mujer.
El se baja tras ella y le cuenta que está solo y se entera de que Elise es hija suya.
Feliz por haber recuperado a la mujer a la que amaba y de saber que tiene una hija, se ofrece a acompañarla a su casa y a compartir su futuro para sorpresa de todos los que pensaban que la historia de Charles la había idealizado Felicie.
Y ya sin dudas acepta la proposición de ir con Charles a la zona de Bretaña, donde abrirá su propio restaurante.