Antes de amanecer
Before Sunrise (1995) * USA / Austria
También conocida como:
-
"Antes del amanecer" (Hispanomérica)
Género: Drama romántico
Duración: 101 min.
Música: Fred Frith
Fotografía: Lee Daniel
Guion: Richard Linklater y Kim Krizan
Dirección: Richard Linklater
Intérpretes: Ethan Hawke (Jesse), Julie Delpy (Céline), Andrea Eckert (Esposa en tren), Hanno Pöschl (Esposo en tren), Karl Bruckschwaiger (Chico en el puente), Tex Rubinowitz (Chico en el puente), Erni Mangold (Lectora de manos), Dominik Castell (Poeta callejero).
El 16 de junio de 1994 Céline trata de leer en el tren que le lleva de Budapest a París, aunque la discusión de una pareja alemana le impide concentrarse, lo que le lleva a buscar un asiento más atrás.
En la fila de al lado viaja otro joven, Jesse, también afectado por la discusión de la pareja alemana, que incluso allí les molesta.
Jesse pregunta a Céline, tras comprobar que habla su idioma, el inglés, si tiene idea de por qué discutían cuando sale la pareja, y, cuando estos regresan, discutiendo de nuevo, Jesse propone a la chica ir al vagón restaurante.
Allí entablan conversación, explicándole ella, que, aunque es francesa, estudió su idioma en Los Angeles y pasó una temporada en Londres.
Él le cuenta que estudió francés, pero no lo habla tan bien.
Ella le cuenta que vuelve a París. Que estudia en la Sorbona y va a empezar los estudios y que viene de Budapest de visitar a su abuela.
Jesse, por su parte viaja a Viena donde va a coger un avión de regreso a Estados Unidos después de haber estado viajando por Europa con un Interrail después de visitar a un amigo en Madrid.
Ella dice que le asusta la muerte, y por eso ha regresado en tren y no en avión.
Llegan a Viena lamentando él no haberla conocido antes, pues debe bajarse allí y le ha gustado hablar con ella, tanto que le gustaría seguir haciéndolo, pues ha notado cierta química y le propone bajarse juntos y visitar Viena.
Le pide que se lo plantee como un viaje en el tiempo, como si en el futuro, ya casada y aburrida de su matrimonio echara marcha tras y pensara en cómo podría haberle ido si hubiera decidido salir con otro y así sabrá con seguridad que no se perdió nada y que no se equivocó al elegir.
Le cuenta que, como ya no le queda apenas dinero, pensaba pasar la noche vagando por la ciudad hasta la hora de coger el avión y ella acaba aceptando la propuesta y se dan sus nombres.
Comienzan a pasear por la ciudad y preguntan a dos chicos que se encuentran para que les den alguna recomendación, dándoles los chicos unas entradas para una obra de teatro amateur en que trabajan ellos.
Cogen tras ello un tranvía, y, mientras viajan en el mismo comienzan a hacerse preguntas sobre sus vidas.
Jesse le pregunta sobre la primera persona por la que tuvo atracción sexual, recordando ella a un muchacho con el que no llegó a nada más que salir alguna vez.
Ella le pregunta si se ha enamorado alguna vez. Respondiendo él con un lacónico sí.
Le pregunta también qué le enfada, diciendo un montón de cosas, tanto personales como del mundo.
Tras una charla / interrogatorio en que van conociéndose mejor, van a una tienda de discos y entran en una cabina para escuchar una canción y se les nota nerviosos, con una evidente tensión sexual.
Visitan también el cementerio de los sin nombre, que ella recuerda visitó de niña, cuando le contaron que la mayoría era gente que apareció ahogada a orillas del Danubio por accidentes o por suicidios.
Van luego al Prater, y allí, subidos a la noria, por fin se besan.
Céline le cuenta que sus padres lucharon en el mayo del 68, luego su padre se convirtió en un arquitecto importante y viajaron mucho.
Jesse le cuenta que los padres de él se divorciaron, pero se esforzaban en ser buenos.
Le pregunta a él si conoce a alguna pareja que sea feliz, diciendo que sí, pero que probablemente se engañan.
Van a una terraza y se les acerca una mujer que lee la palma de la mano a Céline, a la que le dice que es una aventurera y le interesa el poder de la mujer y que se va a convertir en una gran mujer.
Luego mira la de él y le dice a ella que le irá bien y cuando se va les dice que son polvo de estrellas.
Jesse se muestra descreído con la mujer, aunque Céline parece contenta.
Pasan luego por la catedral. Al salir ella le dice que seguro que se habría bajado en Salzburgo con otro si no se hubiera bajado con él antes.
Todo va muy bien entre ellos, pero ella dice que es porque están en un lugar en que nadie le puede contar las cosas malas de él.
Pasean luego junto al Donaukanal, donde les para un hombre que les pide que le den una palabra y compondrá un poema, y solo si les gustas le darán algo de dinero.
A ellos se les ocurre la palabra batido y él crea un bonito poema que les entrega, dándole ellos dinero a cambio, tal como acordaron.
Jesse se muestra de nuevo más prosaico y le dice a Céline que está seguro que ese poema no es nuevo. Que el hombre solo cambió un poco un poema que ya tenía hecho, introduciendo la palabra que le dijeron.
Entran luego a un pub donde un músico toca y canta sus canciones y donde debe ser ella quien le invite, ya que él se quedó sin dinero
Debe invitarlo ella, pues él se quedó ya sin dinero y juegan al pinball.
Le pregunta si tiene algún novio esperándola en París, y Céline le explica que ya no. Que lo tuvo, pero que lo dejaron seis meses antes.
Luego es ella quien le pregunta a él si sale con alguien.
Él dice que el amor es una evasión para dos personas que no quieren estar solas, adivinando ella que tras esas palabras se esconde alguien que acaba de terminar una relación, por lo que le pregunta quién acaba de romper con él y de herirlo, reconociendo él que no vino a Europa solo para recorrerla. Lo hizo porque su novia estaba haciendo un estudio de Historia del Arte en Madrid y se dio cuenta tras ir de que ella deseaba que no hubiera ido, y consiguió un vuelo barato desde Viena, pero como le faltaban dos semanas para regresar compró el Interrail.
Céline le dice que fueron los hombres quienes inventaron el feminismo para acostarse con más mujeres hablándoles de su liberación.
Siguen recorriendo las calles y hablando, asegurando Jesse que preferiría haber destacado en algo que tener una gran relación amorosa, aunque ella le dice que conoció a un anciano que lamentaba no haberse entregado del todo a nadie por haber estado siempre preocupado por su trabajo.
Más tarde, en otro bar, simulan que ella llama a su mejor amiga y le habla de él.
Luego simulan la llamada de él a un amigo y le cuenta el fracaso con su novia y de que conoció a otra chica.
Les fascina esa noche porque no debería haber pasado.
Suben luego a un bar que hay a bordo de un barco y empiezan a especular sobre su futuro y sobre si volverán a verse después del día siguiente y acuerdan no hacerse ilusiones ni proyectos.
En otro pub, Jesse le explica al camarero que es su única noche juntos y ella quiere una botella de vino tinto, pero no tiene dinero, pero le asegura que si le da la dirección él promete que le enviará el dinero.
El hombre acepta mientras ella se guarda varias copas en el bolso y más tarde beben la botella de vino tumbados en el césped del parque.
Él dice que seguro que si estuvieran siempre juntos ella acabaría odiando algunas de sus costumbres, pues él mismo a veces huiría porque está siempre consigo mismo y odia algunas de esas cosas.
Tras besarse nuevamente, ella le dice que cree que no deben acostarse aunque les apetezca, porque de hacerlo, como no se van a volver a ver, estaría pensando si está con otra y no quiere que sea una burda historia más en que él cumpliría una fantasía masculina de enrollarse con una francesa en un tren.
Le dice que pensó que quería acostarse con él cuando se bajaron del tren, pero ahora ya no lo sabe, después de haber hablado tanto.
Tras hacerlo, y cuando amanece, siguen paseando por las calles y comentan que han vuelto al tiempo real.
Escuchan a un tipo tocando un clavicordio tras una ventana y bailan un momento frente a esta.
Él la mira y dice que va a hacerle una foto para no olvidarla nunca, y se quedan mirándose mutuamente, tras lo que vuelven a besarse.
Se sientan al pie de una estatua y ella se recuesta sobre él.
Ella dice que a ella le pasaría lo contrario de lo que él dijo. Que al conocer ya sus costumbres y al saber cómo va a reaccionar en cada situación sería genial y sabría al pensarlo que estaba enamorada de verdad.
Van luego a la estación, donde ella debe coger el tren hacia París, y manifiestan la pena que les da tener que separarse, y se besan de nuevo antes de que ella suba al tren.
Él dice entonces que no quiere que no se vuelvan a ver como habían acordado antes, ante lo que Céline propone quedar allí mismo dentro de 5 años, aunque luego dicen que en un año, proponiendo él, finalmente, 6 meses. El 16 de diciembre, aunque entre medias no se llamarán.
El tren parte y él se aleja en dirección contraria, mientras en el vagón ella sonríe antes de dormirse.