Te cuento la película

Ane
Ane

España (2020) *

Duración: 100 min.

Música: Jorge Granda

Fotografía: Víctor Benavides

Guion y Dirección: David Pérez Sañudo

Intérpretes: Patricia López Arnaiz (Lide), Jone Laspiur (Ane), Mikel Losada (Fernando), Aia Kruse (Leire), Luis Callejo (Eneko), Nagore Aranburu (Isabel), Lorea Ibarra (Maitane)

Euskal Herria 2009

Lide trabaja como guardia de seguridad en las obras del tren de alta velocidad de Euzkadi.

Una noche un artefacto explosivo impacta contra la caseta en que está, consiguiendo ella sofocar el incendio con el extintor, aunque no logra ver a los autores.

Sale luego de fiesta con una amiga, fijándose en un chico, con el que luego se irá, pasando, ya borrachos, junto a un contenedor que está ardiendo.

Por la mañana prepara dos desayunos, pero cuando va a la habitación de su hija Ane ve que no se encuentra allí, y aunque trata de llamarla, siempre le salta el contestador.

Va al gimnasio, y trata de hablar con ella de nuevo, siempre con el mismo resultado.

Les avisan del colegio a ella y a Fernando, el padre de Ane, porque su hija lleva dos días sin aparecer por clase, informándoles que la semana anterior faltó otras tres veces, advirtiéndoles que si sigue haciéndolo la expulsarán, y están en puertas de la selectividad.

Además llamó traidor al profesor de Geografía, y esa mañana le pincharon las ruedas del coche al profesor y le pintaron "Potolo Kabron", y piensan que es ella la autora, pues lo graba todo, indicando su madre que es lógico, porque quiere estudiar audiovisuales.

Pero le tuvieron que requisar la cámara por sacar la cámara en medio de la clase y grabar al profesor.

Fernando le muestra luego su preocupación por Ane, pues no fue a su casa tampoco, preguntándole si discutieron, diciendo ella que fue Ane la que la insultó y le dijo que le daba asco y que era una mercenaria del estado.

Va a comprar y la tendera, Carmen le da una tarta para que se la regale a su hija de su parte, pues está muy orgullosa de lo que está haciendo, aunque Lide no sabe de qué le habla, explicándole que luchan para evitar las expropiaciones de sus bloques recogiendo firmas y que incluso la entrevistó para un documental, pues saben que no están dispuestos a dejarse comprar por un local y una vivienda de protección en otro barrio.

Trata de buscar a su hija, yendo al Gaztetxe, donde están en efecto los amigos de su hija movilizados contra la construcción de las vías del tren de alta velocidad.

Ve a su amiga Maitane, que le dice que tampoco la ha visto desde el día anterior, y que le contó que tuvo bronca en su casa con ella.

Regresa por la noche a su trabajo pese a ser su día libre para ver las imágenes de las cámaras de seguridad, aunque no logra descubrir nada.

Lide va a todas partes con el coche de la empresa, pese a las advertencias de Isabel, su jefa, viendo cómo le lanzan una botella al parabrisas.

Por la noche vuelve a la habitación de su hija y enciende su ordenador, donde ve grabaciones y fotos con ella que le parecen muy tiernas.

Pero también ve un disco duro donde pone Gakoa, habiendo varias películas donde se ve a activistas realizando actos violentos, apareciendo incluso un tipo enmascarado con un arma que le quitaron a la Ertzaintza.

Llaman entonces a la puerta, apareciendo un hombre, Eneko, que dice que es el padre de una compañera de su hija a la que Ane molesta constantemente, pues le pidió dinero tres veces, para una colecta contra la expropiación de Gaztetxe, y cuando se negó a entregárselo la cuarta vez discutieron y Ane va diciendo que no está comprometida y la llama Loba, por el Lobo infiltrado en ETA.

Lide le dice que sus hijas tienen 17 años, pero el hombre le dice que si sigue acosando a su hija hablará con el jefe de estudios y hará que cambien a su hija de instituto.

Sigue viendo los videos de acciones violentas y reconoce en uno de ellos las botas de su hija.

Escucha la noticia de la fuga de dos jóvenes que se dieron a la fuga por los altercados producidos durante una concentración, entre ellos Iker Gorostiaga, responsable de la recogida de fondos.

Informan además de la explosión de un artefacto en la sede de Construcciones Zadorra, la empresa encargada de ejecutar las obras del tren de alta velocidad, para la que ella trabaja.

Acude al hospital para ver a Isabel, su jefa, herida en el ataque, y le pide dos días libres para tratar de encontrar a su hija, aunque Isabel le dice que no pueden prescindir de ella, pues tienen mucho trabajo, diciéndole Lide que entonces dejará el trabajo, permitiendo entonces que le pida a su compañero Rojas que le cambie el turno.

Decide ir a denunciar la desaparición al cuartel de la Ertzaintza, aunque se arrepiente y se marcha sin interponer la denuncia.

Va tras ello de nuevo al instituto y habla con el director, al que le pregunta si tienen pruebas de que fue su hija la que pinchó las ruedas, pues si lo saben, deben pararle los pies, y le dice que asalvajaron a Ane no exigiéndole responsabilidades por sus actos.

Va a mostrarle a Fernando, que ahora vive con su madre, los videos que encontró en su ordenador.

Fernando reconoce que un par de meses antes Ane estuvo en Baiona con sus compañeros para una concentración, pero decidieron no contárselo para que no se enfadara y sabe que tampoco fue al taller de periodismo.

Van juntos a hablar con sus compañeros del Gaztetxe, pero no solo no están receptivos, sino que se muestran incluso violentos, pues les dicen que Ane e Iker se marcharon con el dinero de la colecta.

Les recibe su profesor de fotografía, que les cuenta que alguien avisó a Iker y al otro activista de que la Ertzaintza iba a por ellos y huyeron, y se queja de que para la policía los Verdes también sean terroristas.

Le preguntan también por la dueña del disco duro, contándoles que es Miren, que dirige una publicación cultural en Donibane, la Llave, en una radio local.

Luego recrimina a Fernando que animara a su hija para la concentración, mostrándoles que les exigió el permiso firmado de sus padres.

Van a hablar con Maitane, la amiga de Ane para preguntarle desde cuándo conoce a Iker, diciéndoles que lo conoció en la concentración un año antes, pero que no sabe si están juntos, confesándoles finalmente que Ane le contó que iba a ir a Baiona para ver a un médico que conocía Iker porque en Francia si permiten abortar sin autorización, pues Ane está embarazada.

Lide piensa que deben ir a Baiona, pero Fernando no cree que esté en Francia ni que esté embarazada, pues es lista y está convencido de que no ha salido del barrio, aunque acaban viajando a Francia, acudiendo a la clínica a la que les dijo Maitane que iba a ir su hija.

Nerviosa, a la salida Lide le pide un cigarrillo a Fernando, que se niega a dárselo, pues le recuerda que le costó mucho dejarlo.

Van luego a ver a Miren, la propietaria del disco duro para preguntarle si sabe dónde está Ane, negándose en principio a contestarles, hasta que Lide la amenaza con entregar su disco duro. Entonces les dice que la vio en la concentración de Baiona contra el TAV unas semanas atrás, no recordando haberla visto el día de las detenciones del gaztetxe, ya que aquel día al llegar los antidisturbios fue un caos, sugiriéndoles que hablen con Adrien, que fue quien se la presentó y con el que suele trabajar, aunque entonces ven que Adrien también fue detenido.

De regreso, Ane le cuenta su discusión con Ane, que, le dice cada día, y cuanto más la conoce, más miedo le da.

Discutieron cuando ella le planteó vender su casa, pues le dijo que se le quedaba muy grande, para comprar uno de los apartamentos nuevos, acusándola su hija de apoyar la expropiación y diciéndole que era una mercenaria del estado, para acabar llamándola puta, respondiéndole ella que de tal palo tal astilla.

Reflexiona pensando que la vida debería haber sido de otra forma.

Ve en la puerta del garaje que pintaron Zadorra traidora y lo limpian entre los dos.

Ya en casa, Lide dice que no sabe si desea que vuelva y que quizá también Ane prefiere que la dejen en paz, diciéndole Fernando que a lo mejor lo que quiere es estar ella más tranquila y llevarse a casa a los veinteañeros que quiera sin preocuparse, acusándola de no haberla vigilado más, para acabar llamándola puta desquiciada.

Ella le dice que está molesto porque pese a ser un super padre tampoco le contó nada a él y le dice que es igual que su hija.

Llaman entonces a la puerta y aparece su hija y se abrazan.

Le preguntan tras ello dónde ha estado, diciendo que de aquí para allá, tras lo que le preguntan si está saliendo con Iker, asegurando que hace días que no sabe de él y que no volvió a casa porque discutió con él.

Le preguntan finalmente si está embarazada, reconociendo que es así, aunque no lo sabía hasta hacía muy poco.

Le hacen ver lo complicado que es un embarazo a su edad.

Le preguntan luego por Adrien, diciendo ella que estaban contando el dinero cuando llegaron los antidisturbios y salieron corriendo con él, y que Adrien debía a ir a recogerlo.

Le piden que deje el tema del gaztexe y deje de ver a Iker.

Deciden ir los tres juntos a Baiona, discutiendo sobre el tema de las expropiaciones, indicando Lide que a los expropiados los compensarán dándoles viviendas nuevas con mayor valor.

Le pregunta luego si le pinchó las ruedas a su profesor, lo que niega.

Fernando le dice a Lide en un momento en que se quedan solos de que a lo mejor se va a trabajar como camarero a Torremolinos, pues en Euzkadi no encuentra nada, proponiendo preguntarle a Ane si desea irse si no quiere estudiar una carrera, pidiéndole que no la deje sola.

La acompañan a la clínica en Baiona donde aborta.

De regreso, y tras dejar a Fernando en su casa, ven que les esperan dos de los compañeros del gaztetxe para exigirle a Ane el dinero recaudado, pues, sin él no habrá actuación para recaudar dinero, aunque ella asegura no saber nada de este, y cuando Lide les pide que se marchen, Peio le dice despectivamente que se vaya a su garita.

Ya en casa, Lide vuelve a preguntarle por el dinero por el que han estado a punto de pegarles, volviendo a repetir Ane que no sabe dónde está.

Le propone luego a su madre salir a cenar juntas y a ver una película la noche siguiente para celebrar su cumpleaños, aunque Lide le recuerda que trabaja y depende de que alguien le cambie el turno.

Al día siguiente se presenta con su hija en el instituto y, dado que ya comprobaron que no fue ella la que pinchó las ruedas del profesor de Geografía, ni hizo la pintada ni la grabación, exige que les pidan perdón a ambas.

Van luego al cine para devolverle a Eneko los 30 Euros que entregó Haizea a Ane, aunque a continuación le dicen que están organizando conciertos y comidas populares y hacen pancartas y camisetas, por lo que les vendría muy bien que les apoyase, con el dinero que le acaban de dar, a lo que se niega y les pide que se marchen, por lo que acaban llamándolo egoísta y Ane le recrimina que se niegue a poner el documental que hicieron los vecinos para salvar el barrio, por lo que acaban mal lo que hicieron como un gran gesto.

Acuden luego al trabajo de Lide para pedir el cambio de turno, aprovechando Ane mientras se queda en el coche esperándola para robarle la tarjeta de acceso.

Entretanto Lide discute con Isabel por el permiso pues le pidió días porque no estaba Ane y ahora le pide otro porque está, diciéndole ella que cumple 18 años, recordándole Isabel que van a colocar la primera piedra y darán una rueda de prensa y debe estar todo controlado.

De regreso, Ane le dice a su madre que quiere ir a casa de su padre y de su abuela para ayudarles con la mudanza, y verles antes de que se marchen, aunque su madre le dice que no les dará tiempo para ir al cine, diciéndole ella que irá en autobús, y que quizá se apunte su padre al cumpleaños, a lo que Lide le responde que va a perder el trabajo por pasar la noche con ella, no con su padre.

Lide le dice que la llevará ella, y Ane le pregunta si no confía en ella, pues no la deja sola desde que regresó, decidiendo dejarla finalmente, prometiéndole Ane que llegará para el cine.

Pero Lide ya no confía en ella y decide seguirla, observando, contenta, que va, en efecto, a casa de su padre.

No la ve cuando sale, ya de noche, de la casa, y se cuela en un bar cerrado, "El andaluz".

Dentro le espera Íker, al que le lleva comida y otras cosas.

Hablan de su plan de huida, pues no desea acabar encarcelado como Adrien.

Ella le dice que según su madre las casas que les darán a los desahuciados tienen más valor que los terrenos, recordándole él que su madre trabaja para el TAV, aunque ella le dice que las obras están creando mucho empleo, no pudiendo dar crédito él a lo que oye.

Él le entrega la caja con el dinero recaudado, aunque falta lo que se quedó para su billete.

Le pregunta si tiene la tarjeta, respondiendo ella afirmativamente.

En su casa, Lide comienza a inquietarse ante la tardanza de Ane, que tiene además el teléfono desconectado y come ella sola un trozo de la tarta, tirando el resto a la basura al comprender que Ane no va a llegar ya.

Va luego al cine, donde la espera hasta que saabe que ya no llegará, no consiguiendo que le coja el teléfono tampoco ahora.

De regreso a su casa, ve ardiendo de nuevo la sede de construcciones Zadorra.

Entretanto, Ane, acompañada por un grupo de activistas, se cuelan en las obras del Tren de Alta Velocidad aprovechando la tarjeta de Lide.

Uno de ellos va hasta la caseta donde debería haber estado ella esa noche, donde colocan un explosivo y lo graban todo.

Cuando Rojas, que sustituyó a su madre esa noche se da cuenta de que están allí, corre hacia la caseta, que explota muy cerca, por lo que acaba herido.

Lide se acerca a la obra, dándose cuenta en ese momento de que no tiene la tarjeta.

Ane, que entrega en el gaztetxe la caja con el dinero, ve que llega su madre a buscarla.

Le pregunta si sabe lo que hizo y si lo hizo porque trabaja ella allí, contándole que por su culpa su compañero Rojas está herido en urgencias.

Le pide tras ello que regrese con ella a casa y que empezarán de cero. Que podrá ir a la universidad en septiembre y le dice que la perdona, aunque Ane no quiere marcharse y le dice que es ella la que la perdona.

Mientras discuten, llegan los antidisturbios (los beltzak) y acaban separadas, debiendo salir corriendo todos, cada uno por su lugar cuando cargan contra ellos.

Acaban cada una a un lado de las vías, llamándola Ane desde su lado antes de huir con un amigo en una moto.

Al día siguiente, Lide prepara el desayuno, como cada mañana, aunque en esta ocasión pone solo el suyo y cierra la puerta del cuarto de su hija.

Pero cuando mientras desayuna suena el timbre, corre a abrir la puerta.

Calificación: 3