Agárralo como puedas 2 1/2. El aroma del miedo
The Naked Gun 2 1/2. The Smell of Fear (1991) * USA
También conocida como:
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"La pistola desnuda 2 1/2: El aroma del miedo" (Argentina)
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"¿Y dónde está el policía? 2 1/2: El aroma del miedo" (Resto de Hispanoamérica)
Duración: 85 Min.
Música: Ira Newborn
Fotografía: Robert Stevens
Guion: : David Zucker y Pat Proft (Basado en "Police Squad!" de David Zucker, Jim Abrahams y Jerry Zucker)
Dirección: David Zucker
Intérpretes: Leslie Nielsen (Frank Drebin), Priscilla Presley (Jane Spencer), George Kennedy (Capitán Ed Hocken), O. J. Simpson (Nordberg), Robert Goulet (Quentin Hapsburg), Richard Griffiths (Dr. Albert S. Meinheimer / Earl Hacker), Jacqueline Brookes (Comisionada Anabell Brumford), Anthony James (Hector Savage), Lloyd Bochner (Terence Baggett), Tim O'Connor (Donald Fenswick), Peter Mark Richman (Arthur Dunwell), Ed Williams (Ted Olsen).
El presidente Bush y su esposa Barbara ofrecen una recepción en la Casa Blanca a la que acuden los presidentes de los consorcios petroleros, carboneros y nucleares del país, anunciando que va a encomendarle al Dr. Albert Meinheimer un estudio sobre políticas energéticas, comprometiéndose a aplicar las recomendaciones efectuadas por este.
Entre los invitados al evento figura el teniente de la policía Frank Drebin, por haber logrado detener a su traficante número 1.000, a lo cual él le quita importancia, asegurando que a los dos últimos los atropelló, y dio la casualidad de que eran narcos.
Drebin muestra su torpeza de inmediato dándole sin querer con la puerta en las narices a la primera dama, para a continuación, y cuando esta va a sentarse en la mesa retirarla la silla haciendo que caiga al suelo, golpeándole tras ello la cabeza contra la mesa al intentar ayudarla a levantarse.
Posteriormente y durante la cena Drebin trata de comer una langosta con cuyas pinzas aprieta el pecho de la directora de la policía, derribando luego de nuevo a la señora Bush al arrancar una pata y golpearla.
En el Instituto Meinheimer trabaja Jane Spencer, que llora mientras ve las fotos de Drebin, debiendo ser el propio Meinheimer quien la anime a conocer a otras personas.
Mientras hablan un encargado de mantenimiento descubre en la papelera que estaba junto a ellos un temporizador pegado a unos cartuchos de dinamita, aunque él no sabe lo que es y se lo lleva a los guardias de seguridad que tampoco parecen saber de qué se trata, preguntándose por qué tiraron un reloj tan bonito, concluyendo que debe ser porque va retrasado, por lo que, al adelantarlo uno de ellos acaba explotando.
Drebin será el encargado de la investigación, descubriendo al llegar al instituto que hay una testigo, que pronto descubrirá que es su antigua novia, Jane, con la que se siente muy dolido, ya que, tal como le recuerda, lo dejó plantado el día de la boda y se marchó, sin que durante los últimos años él volviera a saber nada de ella.
Jane les cuenta que vio a un hombre con bigote, tras lo que le muestran el laboratorio donde investigan, y en el que, de nuevo accidentalmente, Drebin provoca la rotura de una máquina cuando se le cae su casco a la misma.
Aparece entonces Quentin Hapsburg, ejecutivo de una compañía petrolífera Hexagon Oil, que es el nuevo novio de Jane.
Afligido, Frank acude a un pub especial para gente amargada y triste, adonde va a verlo su amigo el capitán Ed Hocken que trata de animarlo, y adonde lo va a buscar también Jane.
Le echa en cara que lo dejara sin explicaciones, preguntándole ella si no recibió todas sus cartas, asegurándole él que las quemó todas, concluyendo ella que debió tirar también la carta con el talón de 75.000 dólares que le llegó de la herencia de una tía.
Le dice que quería contarle que recordó que vio una furgoneta roja, y aprovechar para disculparse, aunque le recuerda que él solo vivía para su trabajo, echándole en cara él que a ella le importaba la capa de ozono más que él, que por agradarla compró una parte de la selva brasileña, y que la taló para construirle una casa, echando a una tribu que vivía allí.
Acaban discutiendo y ella lo abofetea.
Mientras tanto los presidentes de los diferentes consorcios energéticos se reúnen preocupados, ya que saben que Meinheimer es un defensor de las energías renovables, y que si da su discurso en la cena del club de prensa anunciando dichas medidas sus sectores se verán perjudicados.
Aparece entonces Hapsburg que dice que en efecto deberían preocuparse, mostrándoles las medidas que Meinheimer va a proponer, como son la utilización de la energía solar, la utilización de lámparas que duran más y consumen menos, los coches electrónicos accionados por paneles solares o las ventanas aislantes, pero, les asegura, no deben preocuparse por ello, pues Meinheimer no llegará a dar su discurso, ya que lo ha secuestrado, habiendo contratado además a Earl Hacker, un doble exacto del doctor, que será el encargado de pronunciar el discurso, en el que defenderá la necesidad de seguir utilizando los combustibles fósiles y nucleares a cambio de 1 millón de dólares.
Drebin regresa a la comisaría, pensando en olvidar a Jane concentrándose en su trabajo, encontrándose con que encontraron una cartera cerca del Instituto Meinheimer donde hay un artículo referido a Hector Savage, que Drebin recuerda era un antiguo boxeador cuyo verdadero nombre era Joe Chicago.
Encuentran también una tarjeta con una dirección enla "Pequeña Italia", el barrio de las putas, llegando gracias a ello hasta un sex shop, donde descubren una furgoneta roja como la que vio Jane, por lo que Nordberg intenta colocar un micrófono.
Mientras hablan con la dependienta, Hocken observa cómo Savage huye por la parte de atrás, por lo que salen corriendo tras su furgoneta, en la cual estaba aun Nordberg, que queda atrapado bajo la misma, que lo arrastra, hasta que en un giro acaba enganchado al coche de Drebin, que al llegar al lugar donde está la furgoneta, una casa rodeada por decenas de policías lo suelta, enganchándose a un autobús que va Detroit.
Al llegar a la casa en la que Savage se atrincheró, informan a Drebin que la furgoneta está a nombre de Hapsburg.
Drebin golpea amistosamente a uno de los policías que rodean la casa provocando sus disparos, seguidos por los demás agentes, que dejan la casa destrozada pese a no haber mediado provocación alguna.
Tratando de conseguir detenerlo, Drebin se sube a un tanque, pero como no sabe conducirlo lo que hace es arrasar la casa permitiendo la huida de Savage, que hasta ese momento estaba rodeado, derribando tras ello una de las paredes del zoo, permitiendo que escapen montones de animales salvajes.
Acude tras ello a una velada en honor a Meinheimer, donde está también Jane, con la que sale a baila ante el asombro de todo el público, pretendiendo conseguir asimismo que Hapsburg se ponga celoso al verlo, lo que le hará cometer errores.
Se dirige tras el baile a su mesa, a la que llega también Meinheimer, que, pese a su memoria fotográfica no recuerda a Drebin, lo que extraña a Jane.
Le muestra a Hapsburg una foto de Savage, ya que llevaba la furgoneta a su nombre, a lo que le responde que le robaron una furgoneta tres días antes.
De nuevo Drebin provocará el caos cuando empuja la silla de ruedas de Meinheimer y se despista viendo cómo Quentin y Jane se besan, chocando contra la mesita de un camarero, que lanza su café contra la entrepierna del doctor y contra su motor, haciendo que la silla se descontrole con él encima del científico, provocando el caos en la sala hasta que Meinheimer sale volando con su silla.
Tras ello Drebin acude a visitar a Jane, para pedirle disculpas, preguntándole por el discurso de Meinheimer, confirmándole ella que apostará por las energías renovables, tras lo cual Drebin le muestra su extrañeza por el hecho de que al doctor se le hubiera olvidado su cara, preguntándole si tiene alguna marca de nacimiento, contándole ella que tiene un antojo en una nalga en forma de mujer sentada en una mecedora.
Luego ella le dice que el doctor es 30 centímetros más alto y se ha vuelto zurdo, por lo que llegan a la conclusión de que Quentin lo ha suplantado por un doble.
Mientras él hace una llamada, Jane va a la ducha sin saber que Savage se ha colado en su casa dispuesto a acabar con ella, que canta mientras se ducha "The way we were", comenzando Savage a cantar con ella, por lo que lo descubre y grita, acudiendo Drebin a salvarla, consiguiendo tras una dura pelea reducirlo al meterle una manguera del sistema contra incendios en su boca haciendo que explote.
Le muestra tras ello a Jane una tarjeta que llevaba Savage de Hapsuburg, en el tinglado 39, lo que le lleva a darse cuenta de que Drebin tiene razón, y de que tiene a Meinheimer.
Le sirve además para reavivar su romance, pues ella reconoce que lo ama y lo desea, y, no pudiendo resistirse más acaba acostándose con ella y haciendo el amor.
Acuden al muelle y Drebin se viste de buzo para poder acercarse a investigar, sin saber que están allí reunidos los empresarios contrarios a las energías limpias.
Escala hasta el techo del tinglado, donde es perseguido por un agresivo perro para acabar cayendo por una claraboya hasta el lugar de la reunión que preside Quentin, que asegura, acabará con él, atándolo junto a Meinheimer.
Mientras Hapsburg acude a la cena del club de prensa donde el falso Meinheimer dará su discurso, Drebin trata de romper sus ligaduras con el roce de un mueble, consiguiendo al hacerlo que caigan sobre Meinheimer diversos objetos: un bate, varias bolas de billar, bolos, un yunque y finalmente aceite y porexpán, irrumpiendo entonces la policía y rescatándolos.
Dado que la comisionada ordenó que impidieran la entrada a Drebin a la cena, y Jane no puede ayudarle, pues está con Quentin, deben colarse disfrazados de mariachi, viéndose obligados además a improvisar una actuación Drebin, Hocken, Nordberg y Meinheimer.
Sorprende tras ello a Hacker y comienza a golpearlo, aunque, visto por los "Chicago Bears", estos se lanzan contra Frank, ya que creen que está atacando a un inválido
Hocken trata de llevar a Meinhaimer a dar su discurso cuando es atacado por Hacker, tratando Meinheimer de defender al policía cortando varios contrapesos del telón que caen sobre la cabeza de Hacker, que sale al escenario, aunque debido a la confusión por los golpes no logra detener su silla, que cae desde el escenario, pudiendo ver todos que anda.
Resuelto ese problema, el verdadero Meinheimer sale para dar su discurso, pero Drebin, que no había visto nada, creyendo que es Hacker le baja los pantalones ante los reunidos para demostrarles que no es el verdadero científico.
Le saca de la confusión Hocken, que informa que detuvo a Hacker y que consiguió que confesara implicando a Hapsburg, aunque este huyó ya llevándose a Jane como rehén, por lo que lo persiguen, debiendo enfrentarse a sus pistoleros en la azotea.
Quentin, que tiene a Jane atada y amordazada le explica a Drebin que tiene un plan B: hará que un dispositivo nuclear vuele el edificio con todos los invitados.
La llegada de Nordberg, que intentaba detener a Hapsburg despista a este que mira cómo se choca contra la pared, permitiendo a Drebin detenerlo, y, amenazando con tirarlo por la ventana le pide el código para desactivar el dispositivo, aunque, cuando va a conseguirlo, Hocken hace que Quentin caiga por la ventana, con la suerte de que cae sobre el toldo de la entrada y se salva, aunque durante solo unos segundo, pues en cuanto llega ileso al suelo aparece uno de los leones de los que escaparon del zoo que lo devora.
Ante la inminencia de la explosión deben evacuar a los invitados, a los que Meinheimer durmió con su informe, debiendo despertarlos haciéndole leer un libro erótico, tras lo cual les piden que evacúen el edificio con calma, lo que la gente hace hasta que se enteran de que hay una bomba, momento en que comienza un enorme caos.
Como no consiguen desactivar la bomba, sino que aceleran su proceso, Drebin y Jane tratan de huir, tropezando el primero al hacerlo con el cable de alimentación de la bomba, que, gracias a él se desenchufa, consiguiendo así salvarlos a todos.
Agradecido, Bush le propne encabezar un cuerpo especial, aunque él rechaza el puesto, prefiriendo ser el teniente de la policía ecológica, tras lo cual le pide a Jane que se case con él, aunque en vez de a ella besa a Barbara Bush, a la que poco después, al salir al balcón donde los saluda la multitud, golpea sin querer haciendo que quede colgada del mismo, arrancándole además su vestido al tratar de rescatarla.