Te cuento la película

Sympathy for Mr. Vengeance

Boksuneun naui geot (2002) * Corea del Sur

          También conocida como:
                    - "El nombre de la venganza" (Argentina)

Duración: 129 min.

Música: Baik Hyun-jhin, Jang Young-gyu

Fotografía: Kim Byeong-il

Guion: Park Chan-wook, Lee Jae-sun, Lee Mu-yeong, Lee Jong-yong

Dirección: Park Chan-wook

Intérpretes: Song Kang-ho (Park Dong-jin), Shin Ha-kyun (Ryu), Bae Doona (Cha Yeong-mi), Han Bo-bae (Yu-sun), Im Ji-eun (Hermana de Ryu), Lee Dae-yeon (Choi).

Una locutora radiofónica lee una de las postales que recibió. En esta, pintada por el remitente, Ryu, aparecen dos niños junto al río.

Ryu explica que la única familia que le queda es su hermana mayor, que, en vez de ir a la universidad se puso a trabajar en una fábrica para que él se pudiera matricular en una escuela de artes plásticas.

Pero cayó gravemente enferma y necesitaban el dinero, por lo que él tuvo que abandonar sus estudios y buscar un trabajo, aunque no quiere decírselo a su hermana.

Cuenta que él es sordomudo de nacimiento y por eso envía la carta a la radio para que se la lean a ella.

Le recuerda a su hermana que le prometió enterrarla junto al río, asegurándole que lo hará, pero dentro de 40 o 50 años, porque él piensa salvarla, habiendo firmado, de hecho, una autorización para donarle un riñón pese a que le pidió que no lo hiciera.

Ryu escucha el programa junto a ella.

Está esperando el resultado de unos análisis de sangre para ver si es compatible, y además le informan en el hospital de que la operación se hará si puede pagar la factura, y si no es compatible deberán esperar a otro, y entretanto ir allí para hacer diálisis.

Un día, mientras hace pis en un urinario, ve carteles que anuncian la venta de órganos.

Entretanto, y para conseguir el dinero de la operación, Ryu trabaja en una fábrica, doblando turno, por lo que está agotado.

En su casa, que es vieja, hay ruidos constantes, tanto por las broncas de los vecinos, como de cuando hacen el amor, pero al ser sordo, su casero pensó que no importaba, pero si su hermana no puede dormir, él tampoco.

De hecho, en el departamento contiguo viven tres jovencitos que se masturban escuchando los gemidos de su hermana, que ellos toman como si fueran ce placer, aunque en realidad son de dolor.

Ryu además tiene una novia, Yeong-mi, que pertenece a la Asociación Revolucionaria Anarquista, y ella redacta e imprime los panfletos del grupo.

Un día, y a pesar de trabajar tan duro, Ryu es despedido, por lo que, dispuesto a hacer cualquier cosa por salvar a su hermana, decide contactar con los traficantes de órganos, que lo recogen y lo llevan hasta un edificio en obras.

Allí le presentan a una mujer, la madre y líder de los traficantes, a la que le explica que solo tiene 10 millones de wons, diciendo ella que es muy poco para conseguir un riñón, pero si le da los 10 millones y uno de sus riñones, le conseguirán uno para su hermana.

Pero cuando se despierta ve que está desnudo en el edificio y con la cicatriz que indica que, en efecto, le sacaron el riñón.

Baja así, desnudo y sin ropa y trata de que alguien pare para recogerle, aunque ningún coche quiere hacerlo al verle desnudo.

21 días más tarde

Les llaman del hospital para decirles que por fin tienen un riñón compatible y que si pagan podrán operarla en 5 días, debiendo él confesarle a su novia lo ocurrido, pateándolo esta furiosa al enterarse de su estupidez.

Busca luego una solución, proponiéndole proceder a un secuestro, pues tienen solo una semana para conseguir el dinero.

Vigilan la casa del empresario que le despidió, al que ven con su hija, y con una amiga.

El plan es secuestrar a la niña y devolverla cuando consigan el dinero, diciendo que le pedirán 26.240.000 wons.

Empiezan a vigilar a la niña, pese a lo cual Ryu no lo ve claro.

Un día, cuando el hombre regresa con su hija y su amiguita en el coche del padre de esta, Dong-jin Park, y mientras ellos los vigilan, ven como otro hombre se coloca delante del coche obligándoles a parar, pidiéndole tras ello a Park, cogiéndose de su pierna, que no le despida, pues dedicó su vida a la empresa Ilshin Electronics, donde estuvo como soldador desde el primer día de esta.

Al ver que el empresario no parece dispuesto a escucharlo, el hombre saca un cuchillo y se raja la tripa frente a ellos y a las niñas.

Consiguen finalmente quitarle el cuchillo y reducirlo, pero la escena lleva a Ryu a pensar que su plan no funcionará, pues a él le despidió ese hombre y será por ello el primer sospechoso.

Deciden por ello llevarse a la hija de Park.

Ignorante de lo que ocurre, la niña, Yu-sun, juega con la hermana de Ryu, preguntando la niña por qué son tan pobres si son amigos de su padre, diciéndole la chica que gastan mucho porque está enferma.

La niña dice que su padre trabaja demasiado y por eso sus padres se divorciaron - aunque en realidad su madre sufrió un accidente, lo que Yu-sun ignora - y cree que por eso les dejó con ellos.

Ryu trata de hacerla llorar para fotografiarla y enviar la foto a su padre, junto con su muñeca, pintada como si tuviera sangre y sin ojos, muñeca que le cambió a la niña por un collar echo por él, adjuntando también una nota de rescate hecha con recortes de periódico en que le piden 26 millones por la niña y una grabación de esta llorando.

La niña, que no sabe que está secuestrada dice que a veces le dan envidia las niñas que tienen una mamá que les cepille el pelo.

Dong-jin recibe un mensaje citándolo en la estación de Geumho frente a la salida 3, siguiéndolo la novia de él, mientras su hermana cuida de la niña.

Pero esta descubre, al ir a lavar la ropa de su hermano, un documento en el que ve que fue despedido, por lo que llama a la empresa para interesarse por el asunto y para decir que su hermano faltaba porque ella estaba enferma y tenía que cuidarla y tampoco asistía a las sesiones nocturnas de formación.

Dong-jin llega con su maletín con el dinero hasta un parque solitario donde le sorprende Ryu por detrás, con una bolsa y cuerdas.

Conseguido el dinero, Ryu regresa a su casa, feliz, observando cuando llega que Yu-sun está sola en el salón viendo la televisión, por lo que se sienta con ella hasta que la niña le entrega un papel, que observa que es de su hermana, que según la niña estaba en el baño, y en el que aquella le dice que el secuestro es lo peor del mundo y le pide que devuelva a Yu-sun de inmediato, tras lo que se despide.

Ryu corre al baño, donde ve que su hermana se suicidó cortándose las venas, por lo que llora desconsolado.

Entretanto, Dong-jin Park, el padre de la niña grita pidiendo socorro, atado a una farola y con una bolsa en la cabeza.

Ryu lleva a la niña, que va llorando, en el coche, con su hermana a su lado.

Tras conducir toda la noche, lleva a su hermana hasta el río, enterrándola bajo un montón de piedras, junto a un árbol y al lado del río, como le prometió.

Aparece entonces un tipo que tiene dificultades para caminar y que se mueve con dificultad, que empieza a quitar las piedras, consiguiendo Ryu ahuyentarle, aunque entonces el hombre se acerca al coche y trata de quitarle a la niña su collar, haciendo que esta, que se había quedado dormida, se despierte y lo ahuyente también, aunque, asustada, sale del coche y trata de ir hacia Ryu, que debido a su sordera no escucha sus gritos ni la ve cuando esta cae al agua, por lo que, cuando se da cuenta de lo ocurrido es demasiado tarde y ve que la niña se ahogó.

Se queda paralizado mirando su cuerpo, convencido de que el agua cubría por completo observando que no es así, ya que el discapacitado llega andando hasta la niña y le arranca el collar con los dientes.

Ryu comprende que no cubría tanto, pero que él no había vuelto desde niño.

Cuando la policía encuentra a la niña muerta, Dong-jin llora desconsolado.

Un policía lo interroga después y le pregunta si tenía enemigos, diciendo él que se considera una persona honrada.

Le preguntan cuánto gana, diciendo él que, como ingeniero eléctrico, tiene buenos ingresos, aunque con la crisis tiene problemas.

Le cuenta que su mujer le dejó y no cuenta con una gran fortuna, no entendiendo por qué le eligieron a él, preguntando el inspector por qué no llamó a la policía, diciéndole él que nunca pensó que pudieran matarla.

Llega otro policía que indica que el cuerpo no presentaba heridas, pero que cuando lo examinen en la morgue probablemente confirmarán que murió ahogada.

El inspector recibe en ese momento una llamada. Tiene pendiente también una operación y pregunta de dónde sacará 20 millones de wons.

Dong-jin Park acude a la morgue, donde comienzan a hacer la autopsia a su hija.

Llora luego desesperado en el prado, llevándole un policía una carta para ver si reconoce a la autora de la letra.

Durante el funeral la madre llora desconsolada, llegando a desmayarse.

Ryu acude, a escondidas hasta el lugar de la incineración.

Al padre se le aparece luego, en su casa, la niña llena de barro y agua y corre a abrazarla, preguntándole la niña por qué no la llevó antes a clases de natación.

Le despierta el timbre al día siguiente.

Va a visitarlo el inspector y la investigación les lleva hasta la antigua casa de Ryu, medio vacía. Allí les dicen que vivían un chico sordo y su hermana, pero nadie vio a la niña.

Dong-jin Park les dice que cree quién pudo ser.

Van hasta una casa donde encuentran a una familia de 5 personas que murieron todos, excepto un niño con el que cargan y que llevan al hospital, donde le dicen que, aunque podría pasar, no creen que se salve.

Mientras hace el amor con su novia, Ryu le pregunta cuándo supo que acabarían así, diciendo ella que cuando lo conoció.

Dong-jin va a la casa de Ryu y reconoce los azulejos, que salían en la foto que recibió de su hija pidiendo el rescate.

Escucha en la radio de los vecinos, dada la fragilidad de las paredes, su radio y en ella una canción dedicada, que solicitó, indican, un joven sordomudo de Doksan-dong, llamado Ryu y se la dedicó a su hermana y del que ya recibieron una postal contando que su hermana estaba enferma, contándoles en la última que su hermana murió, añadiendo que por su culpa y que por eso su vida ya no tiene sentido.

En la radio le dicen que le regalarán un aire acondicionado.

Dong-jin acude a la radio y pregunta por esas postales, que guardaron porque les parecieron muy bonitas, aunque él les cuenta que el que las envió era un secuestrador.

Al ver las postales pintadas por él, descubre que la última representa lo ocurrido con su hija. Se dibujó a sí mismo enterrando a su hermana y Yu-sun muerta al lado.

Vuelve tras ello hasta el río y atraviesa el puente del que cayó su hija.

Comienza a hacer votar piedras en el río y después de unas cuantas deja al descubierto la mano de la hermana de Ryu.

Aparece el muchacho discapacitado de la otra vez, viendo en su cuello el collar que llevaba su hija en las fotos que recibió.

Llevan el cadáver de la mujer hasta el anatómico.

Habla luego con Choi, un investigador, y le da el número de matrícula del coche en que llegó Yu-sun, y que el discapacitado le indicó.

Choi le dice que según la autopsia la muerta era la hermana de Ryu y la matrícula coincide con la de él.

Choi le cuenta que a la hermana le quedaba poco tiempo de vida, y, aunque había aparecido un donante, no podían pagar el trasplante.

Dong-jin asegura que lo matará.

La novia de Ryu, por su parte, realiza varias llamadas tratando de localizar a los traficantes de órganos, por cuya culpa murió su hermana.

Entre tanto Yeong-mi hace propaganda pidiendo el boicot a las multinacionales norteamericanas.

Será ella le encargada de contactar con los ladrones, a los que finge que desea comprar un órgano y con los que queda para el día siguiente, llevando el dinero.

Ryu se hace con un bate y sigue a uno de los traficantes que le sacaron el riñón, al que golpea con el bate cuando va a entrar en su apartamento, entra luego a este y ataca al hermano mientras hacía el amor con otra chica, y aunque aguanta el golpe de Ryu del bate, este le clava un destornillador en el cuello, acabando con él.

Arrastra luego hasta dentro del apartamento al primero de los hermanos y comienza a golpear su cabeza repetidamente hasta destrozarla, mientras la madre busca un bisturí con el que se dirige hacia él.

Dong-jin lleva a cabo también su venganza yendo al apartamento de Yeong-mi. La golpea y la ata a una silla, colocándole tras ello los polos de una batería en cada oreja y le pregunta dónde está Ryu, aunque ella no responde.

Le cubre la cabeza con una sábana, y pone en marcha la batería, haciéndola gritar de dolor hasta hacerla perder el conocimiento.

Llega un repartidor de comida que había pedido ella y acaba también con él.

Mientras come lo que le trajeron, ve que la chica se hizo pis.

Encuentra más fotos de su hija con Ryu y con su novia, y ve que la chica jugaba con ellos y parecía quererlos.

Ella le cuenta que no la mataron a propósito, que fue un accidente y le indica que ella no es una persona normal y si le ocurre algo, su organización, que es un grupo terrorista, lo buscarán para matarle, pues saben quién es, y le pide que la deje si quiere seguir con vida, aunque en respuesta vuelve a encender la batería.

Por su parte Ryu, en el apartamento de los traficantes de órganos trata de taponar con una toalla una raja que le hizo la mujer en la tripa.

Dong-jin vela en el hospital al pequeño que encontraron moribundo.

Cuando la policía encuentra el cadáver de Yeong-mi, ya saben que fue compañera de Ryu en el instituto, donde se hizo pasar por sorda hasta que la descubrieron.

Saben también que era activista de izquierdas y que en una ocasión trató de ir a Corea del Norte embarcándose como polizón, tratando de llegar a Pyongyang para acudir a una reunión con Kim Yong II, pero quedó atrapada entre las redes de los pescadores y la encontraron.

Saben que pertenecía a la Asociación Revolucionaria Anarquista, aunque piensa que ella era su único miembro.

Herido, Ryu regresa a casa de su novia, viendo que las ambulancias se agolpan fuera, y cuando sube a su piso ve que trasladan el cadáver del repartidor.

Informan a Choi de que encontraron panfletos de la chica en la escena del otro crimen, enterándose así del triple asesinato de los traficantes de órganos.

Bajan en el mismo ascensor que Ryu, aunque no lo identifican, viendo este, cómo, mientras bajan, se cae la sábana que cubría el cadáver, viendo así que se trata de Yeong-mi. Coge su mano, mientras él sigue sangrando.

Llora luego en su coche y esconde un cuchillo en un periódico, dispuesto a acabar con Dong-jin, aunque este no está allí, sino que fue a su casa y se cuela dentro.

Los policías acuden al otro escenario del crimen, recibiendo Dong-jin una llamada de Choi, que le dice que se ha vuelto loco y que lo que le hizo a la chica es horrible, y que también el chico sordomudo se volvió loco, pues acabó con la vida de unos traficantes de órganos y les sacó los riñones.

Ryu vigila la casa de Dong-jin con su cuchillo escondido, sin salir del coche ni para hacer pis. Lo hace en una botella.

Cada uno espera al otro en el domicilio contrario, siendo Ryu quien se marcha.

Al llegar a su casa puede ver desde la ventana a Dong-jin durmiendo y trata de sorprenderlo, pero está tan débil que se desmaya antes de entrar.

El ruido que hace, despierta a Dong-jin que lo arrastra hasta dentro de la casa, y que, al verlo llora y lo patea y lo abofetea, aunque no consigue que vuelva en sí, decidiendo apuñalarlo, aunque finalmente no lo hace.

Regresa después al río y arrastra a Dong-jin hasta el lugar donde murió su hija.

En el agua, Ryu recupera el conocimiento, viendo que está atado.

Le corta las cuerdas y se pregunta por qué la vida le ha hecho eso, pues es un hombre honrado, pero debe matarlo.

Le hace un corte en el talón de Aquiles, comenzando Ryu a desangrarse mientras chapotea y salpica con su sangre al propio Dong-jin.

Mientras está en coche recibe una llamada del hospital de Inchon para informarle que el niño murió y que debe pasar por allí para hacerse cargo del cadáver, pues creen que es su padre, aunque él indica que no sabe de qué le hablan.

Comienza a cavar para enterrar a Ryu, cuando ve que se acerca un coche.

Salen de él cuatro hombres, uno de los cuales apuñala a Dong-jin, rematado luego por otros dos. El cuarto le coloca un papel en el pecho y clava un puñal sobre él sujetándolo.

Dong-jin pregunta por qué, viendo que en papel indican que se trata de la Asociación Revolucionaria Anarquista.

Él dice que tuvo que hacerlo, recordando que la chica dijo que le buscarían para matarle.

Ve alejarse el coche, mientras se desangra sentado junto a su coche y repite que tenía que hacerlo y le dice al cadáver de Ryu, metido en varias bolsas que sabe que le comprende, que tenía que matarlo, repitiéndolo así hasta morir.

Calificación: 3