¡Armas al hombro!
Shoulder Arms (1918) * USA
Duración: 45 min.
Música: Charles Chaplin (Compuesta en 1957)
Fotografía: Roland Totheroh
Guion y Dirección: Charles Chaplin
Intérpretes: Charlie Chaplin (Recluta), Edna Purviance (Francesa), Sydney Chaplin (Sargento / Káiser), Jack Wilson (Príncipe heredero alemán), Henry Bergman (Sargento alemán / Mariscal von Hindenburg), Albert Austin (Soldado estadounidense / soldado alemán), Tom Wilson (Leñador), John Rand (Soldado estadounidense), J. Parks Jones (Soldado estadounidense).
Charlie es el más destacado de los torpes del pelotón de los torpes del campo de entrenamiento, pese a lo cual finalizará dicho periodo siendo enviado al frente.
Ya en el frente, y mientras hace guardia entre el fuego enemigo recuerda los buenos tiempos, viendo cómo todos sus compañeros reciben cartas y paquetes menos él.
Cuando recibe uno en el mismo hay un queso limburgués, con un olor tan fuerte que lo lanza como un arma hacia la trinchera enemiga.
El tiempo es terrible y de pronto su barracón se inunda por las lluvias, debiendo dormir bajo el agua.
Cuando finalmente entran en batalla él solo consigue conquistar la trinchera enemiga y apresar a 13 soldados alemanes, afirmando que lo hizo rodeándolos.
Cuando solicitan voluntarios para una misión, se ofrece, aunque cuando le dicen que tal vez no vuelva, pues debe atravesar las líneas enemigas trata de echarse atrás, aunque no se lo permiten.
Camuflado como si fuera un árbol traspasa las líneas, hasta quedar tan cerca del enemigo que uno de ellos se le acerca con un hacha, y, temiendo que trate de talarlo debe golpearlo, haciendo lo mismo con los dos siguientes.
Tras ello llega un grupo de soldados alemanes llevando como prisionero a uno de sus compañeros, y se disponen a fusilarlo. Él lo evitará golpeando a los tiradores que se habían puesto a su lado.
Pero, descubierto, debe huir, perseguido por los alemanes hasta llegar a una casa semirruinosa por los efectos de la guerra, quedándose dormido.
Llega entonces una mujer y al descubrirlo y verlo herido le cura las heridas.
Al despertar se queda prendado de ella aunque dado que ella habla francés no se entienden, aunque le hace entender que él es americano y no alemán.
Pero poco después llegan estos, que consiguen rodearlo, pese a lo cual consigue hacerse con la ametralladora con que le apuntaban a él y desarmarlos, aunque poco después es él el sorprendido por otro soldado, aunque, pese a todo consigue escapar.
No tiene tanta suerte la mujer francesa, que es detenida por colaborar con los aliados, tratando el oficial alemán de aprovecharse de ella, siendo salvada por Charlie, que tras colarse por la chimenea consigue deshacerse de él.
Llega en ese momento el Káiser, que está visitando el frente, por lo que Charlie y la chica francesa no pueden huir.
Cuando este entra encontrará a Charlie vestido con el uniforme del oficial al que golpeó.
Al salir ve cómo los soldados alemanes se cuadran ante él, descubriendo que un grupo de soldados llega llevando nuevamente prisionero a su amigo al que salvó, debiendo golpearlo para simular que es alemán, aunque cuando se marchan todos los alemanes lo abraza.
Se librará tras ello del piloto y del copiloto del coche del Káiser, vistiendo con sus ropas a la chica y a su amigo, por lo que, tras subir el Káiser al coche, este será conducido hasta el cuartel de los aliados, donde son recibidos como héroes.
Pero entonces sus compañeros le despiertan, descubriendo que continúa en el campamento y de que todo había sido un sueño.